San Floriano del Collio Franco Terpin es hijo del arte y siempre ha trabajado en la finca familiar de San Floriano del Collio, en la frontera más oriental de Friuli. A principios de los años setenta se hizo cargo él mismo de la producción de uva, tomando el relevo de su padre, primero continuando con el otorgamiento y unos 20 años más tarde dando el giro decisivo de su vida, el de etiquetar su propio vino. La bodega consta de 10 hectáreas, entre ellas Cru Stamas, que descansan sobre un suelo rico en ponka, una mezcla de arenisca y marga, perfecto para el cultivo de uvas como Ribolla Gialla, Pinot Grigio, Friulano, Sauvignon, Merlot y Cabernet Sauvignon. La idea que Franco tiene del vino es absolutamente natural, desde el viñedo hasta la bodega, no se utilizan productos químicos y la vinificación se lleva a cabo mediante largas maceraciones, fermentación espontánea y levaduras autóctonas, con un largo envejecimiento en madera y sin clarificación ni filtración. Sólo se utilizan dosis homeopáticas de cobre y azufre para combatir el mildiu y el oídio. El resultado son vinos sorprendentes, hijos orgullosos de un territorio magnífico, listos para asombrar a los paladares más exigentes.