Jakob Tennstedt
Traben-Trabarch, Alemania La historia de Jakob es para contarla, quizá con un buen vaso de su vino. Desde Berlín, adquirió experiencia en diversas bodegas de Europa: Austria, Italia, Francia y, finalmente, Mosela. Aquí encuentra el equilibrio ideal para desarrollar su idea del vino. Se adentra en la historia del Mosela y la redefine con vinos sorprendentes, susurrantes y potentes al mismo tiempo. La atención se centra en el viñedo, donde las plantas y las uvas se dejan desarrollar hasta que el fruto está completamente maduro, año tras año. En la bodega, las uvas perfectamente maduras se procesan con la mínima intervención necesaria para producir vinos complejos con una larga vida por delante. Todos los vinos están completamente libres de aditivos.