Carolina Gatti Raboso 2018

Ponte di Piave (Tv), Véneto

Carolina Gatti es enóloga, bloguera y, sobre todo, enóloga. Decidido y valiente, libre.

Su empresa ocupa 5 hectáreas en Ponte di Piave, en las colinas de Conegliano-Valdobbiadene. Inextricablemente ligada al Raboso del Piave, una variedad realmente poco conocida pero generosa, si se sabe trabajar, Carolina tiene ya muchas añadas a sus espaldas, habiendo participado en las cosechas en su casa desde que era una niña.

Se acerca al vino con una idea convencional del mismo, pero rápidamente adopta una filosofía poco intervencionista y natural.

Prueba de ello son los sistemas en los que cultiva sus vides en la Marca Trevigiana, una técnica muy antigua y realmente obsoleta llamada Belussera. Se trata de un sistema de entrenamiento no mecanizado similar a la Belussera.

Sus viñedos se acercan a los 100 años y le fueron entregados por su padre Lorenzo, que aún hoy la ayuda, junto con su madre Renata y su hermano Lino.

La bodega es realmente un gran ecosistema, ya que junto a los viñedos hay campos de maíz y se cría ganado, del que también procede la materia orgánica que se utiliza como abono.

Los tratamientos en el viñedo son muy escasos, desde la mezcla bordelesa hasta una distribución mínima de azufre y cobre, en la bodega sólo se utilizan levaduras autóctonas, los vinos no se filtran y se añade dióxido de azufre en cantidades muy pequeñas.